jueves, 24 de marzo de 2022

Mi madre era de Mariúpol de Natascha Wodin



MI MADRE ERA DE MARIÚPOL. NATASCHA WODIN. Editorial Libros del Asteroide. 2019.

Hola, lectores.

Hoy, un jueves de marzo en el que seguimos inmersos en la guerra de Ucrania, vengo a reseñar un libro que tiene mucho que ver con ella.

La autora es hija de una ucraniana nacida en la devastada actualmente Mariúpol, a orillas del mar de Azov. Su madre, Yevguenia Iváschenko tiene también raíces italianas y cuya familia perteneció a la nobleza y a la burguesía rusa.

Aunque su título está dedicado a su madre, cuenta las vivencias de sus antepasados maternos, desde sus bisabuelos hasta que Natascha y su hermana residen con sus padres en Núremberg, Alemania.

Gracias a un foro de ucranianos con origen griego consigue información sobre muchos de ellos. Logra incluso contactar con primos que viven muy lejos, algunos en Rusia, que no sólo le proporcionan datos, fechas, hechos y fotos, sino también un diario de la hermana de su madre, Lidia.

Nos encontraremos aquí retazos de las biografías de bisabuelos, abuelos, tíos, primos... Sobre todo, la interesante vida de Lidia, hermana mayor de Yevguenia que llegó a estudiar en la universidad. 

Al mismo tiempo, y he aquí lo interesante y actual del libro, nos encontraremos descripciones de las diferentes situaciones por las que pasó la ciudad de Mariúpol y en general Ucrania a lo largo de la Historia. Desde la época zarista, pasando por la revolución bolchevique; la dictadura de Stalin; el Holodomor (el Holocausto ucraniano); la invasión alemana y la posterior deportación de trabajadores esclavos a Alemania; y la posguerra.

La madre de la autora y su padre se ven forzados a trasladarse a Alemania junto con muchísimos ucranianos no judíos para trabajar en campos de trabajo. Allí, casi en las mismas condiciones que en los campos de concentración están empleados esclavamente en fábricas de armamento y de logística militar, en el servicio doméstico... Eran los llamados Ostarbeiter y sólo estaban un escalón por encima de los judíos, pues se les tenía un odio indescriptible a los rusos (incluidas aquí todas las naciones satélite).

Después de la II Guerra Mundial muchos de ellos no querían ser repatriados porque en su patria eran considerados traidores, aun habiendo muerto ya Stalin, el terror de todos ellos. Algunos se quedaron en la nación germana y otros emigraron a EE.UU. aunque bajo el ostracismo social en el que estaban, una gran mayoría no obtuvo el permiso.

En definitiva, este documento es un texto ameno y no obstante sea biográfico, tiene especial relevancia por la descripción de un país muy desconocido por todos hasta la actualidad (desgraciadamente tiene que venir una guerra para que nos asalte la curiosidad).

Ucrania, denostada durante mucho tiempo por su vínculo con Rusia y a lo largo de varias épocas la gran olvidada, es retratada aquí como un país que ha sufrido y sufre siempre por conseguir su independencia y reivindicar la grandeza de sus autóctonos y su costumbres. 

Una lectura que recomiendo encarecidamente en los tiempos que corren para conocer de la mano de una familia que recorre un camino de ingente sufrimiento desde que su acomodada vida se termina con la Revolución bolchevique, los complejos y severos sucesos que acontecieron en Ucrania.

Un saludo.

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