EL MANIPULADOR. FRANCISCO LORENZO. Roca Editorial. 2024.
Buenos días.
Segundo día de esta semana en que nos vemos por aquí.
Hoy la novela que os traigo es un thriller bastante enrevesado y no solo por la trama, sino también por la mente del asesino que, como bien dice el título, es un manipulador.
Los dos personajes clave son Yoel Garza y Antonio Serván, que se conocen desde el colegio. Muchos años después, veinte nada menos, vuelven a cruzar sus caminos. Yoel es un apreciado policía y bastante inteligente, mientras que Antonio es un escritor best seller.
El primero, gracias a su inteligencia, fue adelantado de curso y tenía una vida social buena. El segundo, aparte de sus dotes literarias, nunca tuvo una buena infancia. Su padre maltrataba a su madre y a él y en el colegio le hacían bullying.
Yoel, pese a haberle defendido de los matones acosadores, está en el punto de mira del escritor debido a una supuesta traición del policía cuando eran más jóvenes y esto ha desembocado en todo un plan concebido por Antonio para hundirlo.
Todo comienza cuando encuentran el anillo de compromiso de la prometida de Yoel, Ángela, junto al esqueleto de un hombre que lleva un diente de oro. Esta escena, aparte de implicar al policía y a su prometida, es la que aparece en una novela escrita por el propio Serván.
Así es como se mueve la primera pieza en la que Yoel se verá acorralado por las argucias de Serván que con todas sus dotes de manipulador, frío y calculador, quiere conseguir que su excompañero de clase sea acusado de las muertes que se están produciendo y que emulan fielmente sus libros.
Una carrera a contrarreloj para evitar ser acusado de algo que no ha hecho y para desenmascarar a Antonio, que hábilmente ha trazado y escrito toda una trama previendo casi todos los movimientos de Yoel.
Como el gato y el ratón, Yoel y Antonio van desvelando las estrategias mutuas y poniéndose trampas para lograr su objetivo. El del policía inculpar al verdadero asesino y el del escritor llevar a cabo su venganza.
En una historia en la que nada es lo que parece y en la que todos los pasos están más que vaticinados por los dos enemigos, el lector se encuentra con un toma y daca en toda regla, donde cada acción tiene una consecuencia inmediata.
Un relato intricado pero bien construido en el que si no prestas mucha atención puedes perderte. La manipulación es un recurso que utilizan los personajes pero también el autor para dejar al lector confuso y desorientado cuando cree que uno de los dos personajes va a vencer y resulta que el otro ya tiene algo planificado para devolvérsela.
Sin dejar flecos pero con algunos argumentos y justificaciones cogidos por pinzas, la novela pretende entretener y a la vez presentar un entramado complejo y que atrape. Quizás menos frentes abiertos y menos retranca maliciosa habría sentado igual de bien sin abrumar al lector, como a veces se puede sentir.
Pero en general, no puedo hablar mal del libro. Tiene un buen ritmo y aunque es como un partido de ping-pong en el que no puedes perder de vista la pelota, consigue que te enganches una vez la cosa pinta cada vez más fea para uno de los contrincantes.
Yo os lo recomiendo para poner a prueba vuestra atención y vuestros nervios, que sí que es verdad que genera cierta tensión y el final..., pues eso, que para gustos los colores. Leedlo y me contaréis.
Un saludo y feliz semana.
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