19 CÁMARAS. JON ARRETXE. Editorial Erein. 2012.
Buenos días a todos.
Hoy me alegra mucho traeros esta reseña de un libro que me ha encantado. Y no, no es lo típico que se dice para quedar bien.
La novela es la primera de la serie de libros del detective Touré, en la que además se basa la nueva serie de RTVE, Detective Touré.
Mahamoud Touré es un hombre negro de Burkina Faso que vive en Bilbao en el ahora conflictivo barrio de San Francisco. No tiene papeles, se dedica a repartir tarjetas de visita donde se ofrece como adivino y se hace llamar Profesor Touré.
Después de esta publicidad, Touré se encuentra un día quedando con una señora que le requiere para vigilar a su marido, el cual parece que se va de putas con un amigo después de unas comidas en las que queda con su cuadrilla.
Touré, que nunca ha ejercido de detective, decide ganarse un dinero extra con esto y con otros favores a esta señora.
Pero esto no resulta ser la única consecuencia de difundir sus tarjetas, pues una nigeriana del mismo barrio contacta con él para que averigüe el paradero de su hermana pequeña desaparecida y que también era prostituta.
Con este nuevo negocio en marcha y otras oportunidades que le surgen gracias a los contactos que hace en su barrio y con otros de más clase social fuera de él, el detective amateur empieza a hacerse un hueco en Bilbao.
El problema es que es un migrante ilegal y a los de su condición la policía no los trata bien. Redadas, cacheos y otros chanchullos llevados a cabo por los que se supone que deben respetar los derechos humanos forman parte del día a día de esa zona.
Son los negros africanos los que más lo sufren y cualquier movimiento extraño puede acabar en la comisaría. Sin contar lo que las cámaras de seguridad graban en las sombras, visionado por el vigilante de la sala de control y que se queda como un secreto por la crueldad y el racismo que reviste.
Con un realismo que deja sin aliento, las calles de San Francisco están descritas como un escenario de miseria y supervivencia. Aunque también vislumbramos en los ojos del propio Touré la esperanza de una vida mejor, llena de amigos y personas cercanas que lo aprecian y ayudan, al igual que él a ellos.
Un libro crudo y desasosegante a veces y tierno y cómico en otras. Eso sí, como he dicho, todo parece tan real y está tan bien ambientado y narrado que cuesta trabajo pensar que Mahamoud es producto de la imaginación del autor.
Y es que tengo que decir que me ha despertado un sentimiento de tristeza e impotencia bastante considerable, porque la vida que refleja de esos migrantes es muy dura. Viven lejos de su familia y su tierra, sin recursos muchos de ellos, bajo la amenaza del racismo y los prejuicios, pugnando por sobrevivir. Porque como dice Touré, los africanos solo miran el día a día, sin pensar en el futuro.
Para mí, aunque el año acaba de empezar, sin duda este es uno de los mejores libros del año. Con una narración fluida, realista, con la justa medida de drama y suspense.
En definitiva, una novela que recomiendo a aquellos que buscan una aventura detectivesca pero a la vez de la vida real. Una historia contemporánea donde el tema de la inmigración y el racismo se retrata de una manera asimilable pero concisa y muy clara.
Os invito a leer esta y seguramente os recomiende las siguientes del detective Touré, puesto que hay nueve.
Un saludo y feliz semana. Leed y cultivaos.
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