LA PALOMA DE RAVENSBRÜCK. CARME MARTÍ. Roca Editorial. 2019.
Una vez más, vengo a reseñar un domingo. Domingo de acueducto en el que estoy ociosamente ociosa en Mérida.
Este libro que traigo hoy por la portada imagino que sabréis de qué va. En efecto, los campos de concentración nazis y la vida de un deportada catalana en ellos.
La protagonista de esta novela basada en hechos reales es Neus Català, una catalana comunista y republicana, miembro importante del PSUC que se exilió a Francia durante la época franquista. Allí formó parte de la Resistencia francesa durante la II Guerra Mundial y fue primero a la cárcel por esto, para ser deportada después a los campos de Ravensbrück y Flossenbürg.
Durante toda la novela nos encontramos con una mujer fuerte, valiente, decidida y muy activa, políticamente y en general en su vida diaria. Fue enfermera durante un tiempo después de sacarse los estudios y también hizo teatro, pero cuando se inició la guerra civil, tuvo que salir de España para dirigirse al país vecino y vivir allí.
Sus padres y su hermano también se exiliaron y vivieron todos en Carsac, donde Neus conoce a Albert, el amor de su vida. Ella y él, colaboradores de la Resistencia que ayudaban a los maquis, fueron detenidos por los nazis y enviados por separado a prisión.
A partir de aquí, Neus pasa por unas penurias inhumanas desde que la detienen hasta que es liberada en el campo de concentración de Flossenbürg, en Praga. Primero es deportada al de Ravensbrück en Alemania, donde comienza a ver la muerte desde muy cerca.
Trabajos esclavos, castigos arbitrarios, hambre, sed, frío, cámaras de gas, crematorios... Todas las barbaridades que pueblan los testimonios de los prisioneros de estos campos.
Pese a ser un libro sobre la barbarie de los campos de exterminio nazis, donde reina la destrucción, la muerte y la desgracia, también se nos presentan las épocas felices y serenas de la vida de Neus. En las cuales vive en un entorno feliz, con su marido, trabajando la tierra y cuidando a los animales, siempre cerca de su familia, aunque lejos de su país.
Después de su estancia en los campos y tras ser liberada, a su vuelta a casa se da cuenta de su vacío interior, de su pánico constante y de otras secuelas de su cautiverio, el cual la mortifica durante muchos años. Siempre con la inestimable ayuda de su amiga Tití y otras prisioneras a las que conoce de su barracón o en las posteriores estancias para la cura de exdeportados, a las que ella acude porque se queda sin rumbo.
También al final, su vida está llena de energía y hasta el último aliento, la mujer siempre estuvo luchando por que se reconociesen los derechos de las mujeres deportadas españolas y que se conociera su historia, para lo cual escribió un libro y tuvo una vida política muy activa.
Solo en las páginas donde se narra la triste y, desgraciadamente común, vida en los campos de la crueldad y masacre, reconocemos el sello característico de este tipo de libros.
Por lo demás, con un estilo cuidado y cercano al lector, la autora nos muestra la existencia de una heroína poco reconocida y conocida en España, que de alguna forma contribuyó con su experiencia y su constante actividad política, a dar voz a aquellas mujeres españolas sobre todo, pero en general mujeres, que habían sido víctimas del nazismo.
Un libro imperdible que fue publicado en 2012 y ha sido reeditado este año, al parecer con un gran éxito de ventas y tras la dedicación de un paseo en París con su nombre en octubre de este año.
No apto, como digo siempre, para almas sensibles, pero sí para los que desean conocer la memoria histórica de estas víctimas, en este caso compatriotas.
Un saludo y Feliz Navidad.
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