Buenos días.
Os traigo una pequeña pero deliciosa novela para empezar la semana.
En la taberna Kamogawa, Nagare, el dueño, y su hija Koishi, tienen una agencia de detectives que se dedica a investigar platos que recuerdan sus clientes.
Un plato de la infancia, comido en una situación especial o con alguna persona cercana o relevante. Si el cliente tiene el recuerdo y además, aporta ciertos detalles, Nagare se encargará de dar con la receta si no justa, lo más aproximada posible para que esa persona disfrute de nuevo de ese sabor que la llevó al cielo y le hizo experimentar muchas emociones.
Una historia peculiar en la que padre e hija abordan seis casos, entre los cuales algunos resultan más difíciles por los pocos datos de que disponen para dar con los ingredientes y modo de cocinar exacto de esa comida tan añorada.
Con el mismo estilo de narración, en el que los clientes se nos presentan en la primera parte de cada historia y después, dos semanas más tarde se muestra la resolución.
¿Queréis disfrutar de los aromas y sabores japoneses de la taberna Kamogawa, un lugar que por fuera pasa desapercibido pero que por dentro guarda la magia de los buenos momentos y personas y de los platos que comemos en ellos y con ellas?
Un libro que abre el apetito incluso sin saber qué es lo que nos menciona, porque está escrito con la delicadeza de los japoneses y de alguien que seguro que aprecia la cocina mucho.
Fácil de leer y saborear, uno de los libros recomendados este año para abrir boca estas navidades.
Un saludo y buenas fiestas.
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