¿Quién mató a Helena Jubany? de Yago García Zamora

 

¿QUIÉN MATÓ A HELENA JUBANY? YAGO GARCÍA ZAMORA. Editorial RBA. 2022.

Buenos martes.

Cercana la prescripción de este crimen, el autor decidió escribir este libro y realizar su trabajo fin de grado sobre él. Ya lo conocía gracias a Crims (el podcast en catalán) y Crímenes (el programa en español de Movistar).

El caso gira en torno a la muerte de Helena Jubany, una joven catalana que fue asesinada en 2001 en Sabadell después de ser arrojada medicada con benzodiacepinas por una terraza.

La chica trabajaba en una biblioteca y había estudiado periodismo. Tenía 27 años cuando la encontraron en un terrado desnuda, con quemaduras y ya muerta.

Después de una chapuza de investigación, donde el juez, el fiscal y demás magistrados estaban bastante perdidos, solo se imputó y condenó a Montse Careta, compañera de Helena en la UES, un grupo de excursionistas de Sabadell.

También hubo otra implicada y condenada, Ana Echaguibel, otro miembro de la UES, que finalmente salió absuelta. Montse acabó sus días en la cárcel cuando se colgó en un baño y desde entonces su hermana Imma ha luchado por defender la inocencia de su hermana.

Todas las pruebas que se recogieron (bien) apuntaban a Montse pero tiempo después otros indicios que se han encontrado así como una revisión del sumario por otras personas ajenas al caso han redirigido la sospecha hacia alguien a quien ya se investigó en su momento pero no de la forma adecuada, Santiago Laiglesia, novio de Montse.

Este hombre es abogado y en su momento asesoró a su pareja para que declarase ciertas cosas que al final lo que hicieron fueron culparla, pues eran contradicciones y evidencias que la perfilaban como la autora del crimen o al menos una de las personas que lo cometieron, pues para cargar con el cuerpo inerte de Helena se necesitaba una fuerza física de la que carecía esta mujer.

Así las cosas, a día de hoy no se conoce la identidad del asesino de forma legal, pero sí de manera informal y hay luces de neón que apuntan al señor del que hemos hablado más arriba, solo que no hay pruebas fehacientes que lo demuestren.

Este libro y la colaboración ciudadana, así como otros trabajos periodísticos han conseguido que se reabra el caso por la aparición de nuevas pruebas.

Veremos cómo se desarrolla. Pero lo que está mal hecho durante la investigación e instrucción ya no se puede arreglar y será difícil dar con el culpable (más bien culparlo con pruebas).

Os invito a conocer este crimen leyendo este libro y si ya lo conocéis, para ahondar más en él y qué se sabe en la actualidad y cómo siguen las pesquisas.

Un saludo.