Seremos recuerdos de Elísabet Benavent

 

SEREMOS RECUERDOS. ELÍSABET BENAVENT. Editorial Suma de Letras. 2018.

Buenos días. Lunes.

Vuelvo con la segunda parte de Fuimos canciones. Ya recordaréis que me gustó más bien poco. Pero este libro, sin embargo, me ha parecido más entretenido y he conectado más.

En este volumen encontramos a Macarena que sigue trabajando de asistente de Pipa la influencer pero necesita ayuda y pide a su jefa buscar una persona con la que poder gestionar todas las tareas que supone llevar al día la vida socio-virtual de alguien tan importante.

Al final encuentran a Candela, una chica que parece maja y que de alguna manera deja a Macarena más tiempo libre para estar con sus amigas, Adriana y Jimena y además, para preocuparse de su vida amorosa.

Lo de Leo tiene pinta de que lo está olvidando aunque sigue viéndolo pues está con Raquel, su amiga influencer. Para darse un empujoncito se registra en una aplicación para encontrar pareja aunque no lo ve muy claro. Sólo un imprevisto mientras está con sus amigas en la calle logra sacarla de la sequía emocional y amorosa por unos días.

El problema es que Leo es un obstáculo. Ahora parece muy cambiado y Macarena cree que se está enamorando de ese nuevo hombre y está dejando atrás aquel que en el pasado le hizo tanto daño. A su vez, Adriana sigue con las dudas sobre su orientación sexual y Jimena está también muy confusa sobre la de su novio, Samuel. 

En esta vorágine de sentimientos, las tres chicas tendrán que lidiar con muchas idas y venidas de amor y desamor, de dilemas que las encaminan hacia la felicidad y el esfuerzo o hacia la comodidad y la resignación.

Nadie dijo nunca que la vida fuera fácil y Macarena sabe de qué habla... sobre todo cuando no sólo es su trabajo lo que peligra, si no su vida sentimental y su presente como la nueva Macarena más fuerte y más decidida.

Esta segunda parte me ha gustado muchísimo más. Aquí los personajes, aunque tienen unas dudas existenciales considerables, tienen las cosas más claras que en la primera parte. La relación y la vida pasada de Macarena y Leo no es un borrón en el que no se distinguen las emociones.

Al menos a mí me ha llegado un poco más adentro, porque las lecciones de vida que da están mejor expresadas que en el anterior libro, son más fáciles de entender y la protagonista, si se enreda en un discurso mental, tiene un lenguaje menos enrevesado emocionalmente. Se la comprende, vamos.

Por eso, por la claridad que no poseía el otro libro y porque por fin sabemos qué ocurre con Macarena y Leo, lo recomiendo a los que leyeron el otro y se decepcionaron como yo. En este la cosa cambia y podemos seguir el ritmo de los acontecimientos.

A las fans de Elísabet no hace falta que se lo aconseje, ya lo habrán leído. Pero creo que habrá muchas que estarán de acuerdo conmigo (de todas formas yo no me caso con los libros de esta mujer) que en general, esta bilogía es menos atractiva que otros libros que he leído, por ejemplo, los de Valeria. Eso sí, por falta de huracán sentimental no será.

Aquí os dejo esta reseña y mis deseos de Feliz Día a todos.