Ofrenda a la tormenta de Dolores Redondo

OFRENDA A LA TORMENTA. DOLORES REDONDO. Editorial Booket. 2017.

Hola, chavales.

Después de que Netflix anunciara la última película de la Trilogía del Baztán cuyo estreno fue postergado hasta después del confinamiento, a mí me ha dado por leer el libro.

Así se acaba una trilogía que comenzó con una serie de asesinatos de adolescentes y acaba con otros de bebés en el pasado, pasando por el de mujeres de mediana edad.

En esta última parte, Amaia tiene que luchar contra un mal mayor, inspirado en Inguma, una especie de monstruo que mata a los bebés antes de los dos años absorbiéndoles el aliento.

Pero como siempre, aunque la mitología está presente, los responsables son personas de carne y hueso que realizan sacrificios con bebés. Una bebé aparece muerta en la actualidad y en apariencia es una muerte súbita, pero se descubre que su padre la ha matado y además, ha querido llevarse su cadáver.

Todo apunta a un extraño ritual que se hace con bebés y que es una ofrenda por parte de una serie de individuos de una secta. Esta aberración se lleva realizando desde hace muchos años y Amaia está convencida de que otras muertes de cuna del valle del Baztán, así como la de su propia hermana sirvieron para ese fin.

Comienza así una investigación en la que se descubren tumbas de bebés forzadas y cuyos cuerpos faltan. Amaia, muy involucrada y pendiente también de la desaparición de su madre Rosario, de cuya supuesta muerte no está convencida, recibe la ayuda del juez Markina, quien le atrae cada vez más.

Pero nada ni nadie es lo que aparenta y el asesinato de alguien importante la lleva a desconfiar de todos y a realizar algunas pesquisas por su cuenta con las pistas que esta persona le ha dejado después de morir.

Así descubre una horrible realidad que se esconde detrás de esas muertes y expolios, que también relacionan los asesinatos de las dos partes primeras de la trilogía. Un círculo que se cierra al fin y que envuelve a Amaia y a sus seres más queridos.

Sin duda, la primera parte fue la que más me gustó. Pero esta es la que me ha gustado más después de aquella. La segunda parte se me hizo un poco pesada y esta, aunque se demora bastante en la vida sentimental de la inspectora, ciertamente no pierde su frescura en cuanto a la investigación y el suspense que se crea acerca de la identidad del responsable último de todos los asesinatos que se produjeron desde el primer libro.

Aquí concluye el periplo de la inspectora Amaia Salazar y los crímenes del Baztán. Aunque todavía es protagonista de otra novela más, La cara norte del corazón, precuela de la trilogía.

Seguramente lea esta última, pero mientras me quedo con el buen sabor de boca que me ha dejado esta historia. Enlazada de forma magistral en los tres libros con un personaje principal con unos orígenes muy peculiares y donde la mitología y las fuerzas paranormales juegan un papel muy importante para entender la conducta de los personajes.

Novelas negras que no sorprenden en todos los finales, pero que consiguen adentrarte en el oscuro mundo del Baztán y sus leyendas y deidades, así como en la compleja mente de los asesinos y de la propia Amaia.

Bien organizada y documentada, con un lenguaje cuidado pero no excesivamente técnico, la historia se desarrolla lentamente al principio para ir tomando velocidad a medida que avanza.

Recomendado a los que iniciaron la trilogía y se estancaron, merece la pena acabarla.

Y aquí concluye lo que empezó con la reseña de El guardián invisible y puede que continúe con la precuela. Esperemos que pronto.

Seguid leyendo a tope, cuidado con el sol y el virus y cuidaos, mucho.

Un saludo.