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sábado, 11 de abril de 2020

Tampoco pido tanto de Megan Maxwell



TAMPOCO PIDO TANTO. MEGAN MAXWELL. Esencia (Editorial Planeta). 2019.

Hola, confitados.

Parece que la cosa sigue adelante y cada vez nos queda menos para estrenar ropa nueva y primaveral y mostrarla al mundo.

Mientras tanto, se puede seguir leyendo y haciendo mil cosas en casa. Yo hago zumba con YouTube, he hecho torrijas y potaje y estoy en proceso de hacer Donuts caseros, a ver si me animo.

Como siempre, lo que os dejo por aquí es la reseña del último libro leído. El de hoy es erótico-romántico y su autora es la conocidísima Megan Maxwell. He leído muchos libros de ella, pero me quedan otros tantos que tengo en mi casa.

Sus novelas, como esta, se caracterizan por tener un marcado erotismo, hasta  el punto de que en algunas más de la mitad del libro son escenas eróticas. Pero siempre hay una bonita historia de amor y muchos sentimientos en medio.

La protagonista aquí es Carol, una italoespañola que vive en Londres y de cuya familia una parte vive en Venecia y otra en Málaga. Es auxiliar de vuelo, pero también tiene como profesión bailarina y acompaña a cantantes famosos en sus giras por el mundo.

Gracias a su amiga Lola, Carol conoce a su hermano, Daryl, un guapo, estiloso, tiquismiquis, elegante y conquistador inglés que es comandante en la misma compañía aérea en la que trabaja ella.

A partir de cierto incidente en un avión, Carol comienza a tontear con él y a practicar sexo en unas noches locas. Pero todo queda ahí y ella no quiere comprometerse más por miedo a perder a su amiga Lola si se entera. Además, hay más inconvenientes. Daryl y ella son muy diferentes y la familia de Carol es muy peculiar, lo que al chico seguramente le desconcertaría dada su rigidez.

Es por eso, que tras muchos vaivenes, incluyendo unas vacaciones y una visita a su familia en Venecia, el futuro de la pareja pende de un hilo. ¿Acabarán juntos Daryl y Carol? ¿O es demasiado grande el abismo que los separa?

Haciendo gala de su maestría en escenas de sexo (incluyendo dogging), Megan nos adentra como nos tiene acostumbrados en el mundo de una mujer sencilla, luchadora e independiente que se enamora de alguien muy diferente a ella y entre los cuales la relación es prácticamente imposible.

Sus personajes femeninos son muy rebeldes, peculiares y siempre buscan autonomía. Sus personajes masculinos son casanovas, mujeriegos que nunca se enamoran y que normalmente, manejan bastante dinero, a los que les gusta el lujo y quienes son bastante rectos.

El amor por los animales y en especial por los perros también está presente y al igual que en otros libros, en este se incluyen sucesos con estos fieles y encantadores animales que nos enternecerán.

Todas estas particularidades las iremos apreciando a lo largo de la narración, pero las escenas eróticas se han reducido bastante y cuando se dan no son tan detalladas o al menos no tan morbosas como en otros libros. Aún así, es muy fogoso y las descripciones son también apasionadas.

Con respecto al sexo más exótico, digamos, tampoco se sale de lo más habitual en las parejas y exceptuando el dogging, no encontramos bondage, swinger o algunos otros tipos de sexo que ya vimos en Pídeme lo que quieras.

En referencia a la historia de amor, es un poco complicada por las personalidades tan opuestas que tienen los dos personajes, pero eso es lo que le da la chispa a la historia. La familia de Carol es graciosísima y por eso, el libro está lleno de pasajes de humor que os sacarán una sonrisa.

También encontraremos lecciones muy valiosas de amistad, fidelidad, respeto, generosidad, humildad y tolerancia. La transexualidad y la transfobia también aparecen, por lo que algunas situaciones nos muestran la falta de respeto y la ignorancia que existe en el mundo todavía sobre esto.

En general, no me ha resultado empalagoso como algunas historias de amor que he leído o algún libro de Megan, porque aquí no se excede como he dicho, con las escenas sexuales y tórridas. Creo que hay un equilibrio entre todos los temas que he mencionado, aunque predomine el amor, claro.

Se lo recomiendo a los románticos y a los que aún no han leído nada de esta autora porque este es un libro ligero, bastante entretenido, cómico y que nos enseña muchos valores.

Espero que sigáis disfrutando de estas y otras lecturas, como yo.

Un saludo y quedaos en casa, se está mejor.

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